OFTALMOLOGÍA
Oftalmología Infantil
Por:
Dra. GRACIELA FILOSA
Médica Oftalmóloga
Oftalmología infantil
Rosario (Argentina)
El estrabismo es la segunda causa más frecuente de consulta en pediatría oftalmológica. Se trata de la desviación de un ojo en forma permanente. Es importante diagnosticarlo y tratarlo a tiempo porque puede producir una gran disminución de la visión.
Los tratamientos dependen del tipo de estrabismo y la edad de aparición. La mayor parte son quirúrgicos, pero hay algunos que se curan con anteojos, como los relacionados con la hipermetropía.
La recomendación para los papás es que si hay antecedentes en la familia de miopía, astigmatismo o hipermetropía, la consulta tiene que ser precoz: a partir de los tres años el niño tiene que ser revisado. Si no hay antecedentes, podemos esperar hasta la edad escolar.
Los padres deben estar atentos ante determinadas conductas visuales de los niños. Si se acercan mucho a mirar las cosas, como un juguete, la televisión o los celulares, tienen que consultar.
Un niño que usa anteojos a tiempo es un niño que tiene posibilidades de tener su mejor visión posible en el futuro.
EL ESTRABISMO EN LOS NIÑOS: ¿SE CORRIGE CON ANTEOJOS?
Hay un tipo especial de estrabismo llamado acomodativo, que se acompaña de hipermetropía. Tiene edad de aparición tardía, a partir de los 4 o 5 años, y se cura con anteojos. Hoy en día se sigue utilizando el parche, pero es para mejorar la visión del ojo desviado, ya que al tapar el ojo sano obligamos a utilizar el desviado.
¿A qué se debe la desviación de un ojo?
El estrabismo tiene un origen central desconocido hasta ahora. Se debe a que los músculos tiran diferentes, es decir, en lugar de que los músculos trabajen de forma ordenada, cada uno como corresponde, hay uno que trabaja menos y otro de más, entonces se desvían los ojos. Los anteojos deben usarse de manera estricta y permanente hasta los 12 o 13 años. Decidimos quitarlos cuando los chicos ya tienen los ojos derechos por completo. De a poquito vamos bajándole la dependencia, porque son chicos que van a seguir usando los anteojos para leer, por ejemplo, pero van a tener ojos derechos y fundamentalmente buena visión.