Hay que tener motivación: la necesidad de dejar de fumar tiene que surgir de uno mismo.
Hay que asumir el compromiso: seguir el tratamiento requiere seriedad.
Y hay que aceptar que se necesita ayuda.
Entrevista con el
Dr. DANIEL BULJUBASICH
Médico Neumonólogo
Especialista en Tabaquismo
Mat. 8641
¿Cómo se hace para que los pacientes dejen de fumar?
El mecanismo es un poco complejo, pero actúa a nivel de los mismos receptores donde actúa la nicotina, dando un efecto menor que ella, sostenido, y además en cierto modo bloquea la acción de la nicotina, lo que hace que uno tolere mucho mejor el síndrome de abstinencia. Eso es a lo que los fumadores le tienen tanto miedo, a cómo van a estar el día después de dejar de fumar: nerviosos, ansiosos, angustiados, tristes, enojados…Hoy, a partir de los nuevos tratamientos, eso se consigue controlar muy bien, y la verdad es que dejar de fumar es una situación mucho más llevadera que antes.
¿El primer paso para dejar de fumar es decidirse a dejar de fumar?
Yo creo que lo primero es pensar en la posibilidad de dejar de fumar, si no, no se puede empezar. Hay dos o tres cosas que alguien tiene que tener para dejar de fumar. En primer lugar, motivación, es decir que hay que tener motivos y que sean propios; la necesidad de dejar de fumar tiene que surgir de uno mismo, nadie va a dejar de fumar porque otra persona le dice que no fume más. Hay una excepción a eso, que es el pedido de los hijos y que suele ser muy fuerte, y a veces hace que alguien se decida por esto. La segunda es comprometerse con el tratamiento. Motivación y compromiso son dos palabras claves: es decir, hay que asumir y hacer el intento con seriedad. La tercera, que tal vez debería ir primero, es la sensación de sentir que uno necesita ayuda. El fumador por alguna razón tiene el concepto de que ha entrado solo en esto, se siente discriminado y piensa que tiene que salir también solo. En realidad, el tabaquismo es una enfermedad y se sale a través de un tratamiento, que lo hace el médico, o sea que no hay que tener temor de acercarse para recibir un tratamiento para dejar de fumar.
¿Con qué se debe acompañar el proceso para dejar de fumar?
La actividad física es fundamental. De hecho, es difícil concebir los tratamientos actuales para dejar de fumar sin hacer actividad física. El que está dejando de fumar puede medir cómo mejora su capacidad respiratoria y su funcionalidad, es decir, se le van los dolores de piernas, el cansancio, el malestar, y pueden mejorar notablemente.